Tasas más altas que las de los plazos fijos

Las colocaciones en pesos de corto plazo ofrecen en estos momentos rendimientos muy atractivos que, a pesar de los altos registros mensuales de inflación, pelean mano a mano con el ritmo de avance del nivel general de precios. Por ejemplo en el caso de las Ledes que emite el Tesoro, que ofrecen tasas internas de retorno por encima del 100% anual

La inflación continúa su marcha acelerada, con un registro del 6% en el primer mes del año y expectativas de que febrero haya cerrado en niveles similares. De esa manera, a la hora de colocar pesos a hacer tasa el inversor local se ve obligado a ser muy ambicioso en términos de tasa nominal si es que aspira a conservar el poder adquisitivo de sus tenencias o, mejor aún, ganar algún punto por encima de lo que avanza el IPC del Indec.

La tasa del 75% anual, 107,05% efectivo anual, que pagan hoy los depósitos a plazo fijo supo atraer a una buena cantidad de ahorristas minoristas que se tientan con rendimientos que después de muchos años compiten con su 6,16% con registros altos de precios.

Pero esa tasa está lejos de ser la única del mercado, o la más conveniente. En el mercado de deuda en pesos las necesidades de financiamiento del Tesoro llevan al Gobierno a convalidar tasas que están por encima de las que pagan los bancos y el banco central. Las Ledes (Letras a Descuento del Tesoro) rinden más hoy por hoy.

Con tasas nominales que pocos días atrás se estimaban entre el 77% y el 91%, según el papel del que se trate, esas colocaciones generan algo más de atractivo a cambio de algo más de riesgo.

Se llaman “letras a descuento” porque al día de su vencimiento pagan $100, pero al momento de emitirlas se las saca al mercado a valores por debajo de ese nivel. La diferencia es el rendimiento que obtiene el inversor.

Por ejemplo, la letra S31M3 con vencimiento el 31 de marzo -la de más corto plazo- cotizaba esta semana a $94,34, lo que hacía que la tasa interna de retorno (TIR) para quien invirtiera en ella estuviera en el 108,2% anual, por encima de los plazos fijos.

Opciones más largas como la letra S28A3 ofrecía una TIR del 116,4% anual, con vencimiento el 28 de abril próximo. Más largas, la S31Y3 con vencimiento en mayo rendía 119,6% y la S30J3 con vencimiento en junio 121,4 por ciento.

Como en toda colocación, invertir en letras de corto plazo tiene pros y contras. Así como riesgos y potenciales ganancias.

Por el lado de las ventajas se puede mencionar su liquidez: se pueden vender a diario, en horario de mercado, en caso de que su dueño necesite hacerse de pesos rápido para enfrentar algún pago. Esto, claro está, dentro de un mercado en el que cotizan también a diarios y en el que sus precios pueden sufrir tanto avances como retrocesos que harán poco conveniente -en algunos casos- venderlas antes de que venzan.

Además del mayor rendimiento y la flexibilidad, por otro lado, están sujetos a riesgos regulatorios que en el pasado se han sabido traducir en reperfilamientos y canjes.

 

 

2 marzo, 2023